Bueno pues una vez más, cuando llega el tercer domingo de septiembre se celebra el San Campio en Fazouro.
Todo preparado por la organización, y por tercer año consecutivo estuvimos invitados por Pili y Candido.
¡Dejad que los niños se acerquen a mi!. Ja, ja ja, no se que les doy, que no se me separan ...
Pienso que San Campio es el que cura los males de la garganta, asi que pata chuli se siente, sigue intentándolo, rezas poco y gritas mucho.
Todo muy bien. Fuimos a misa, pusieron el santo, salimos en procesión, comimos, bebimos, reimos, criticamos, volvimos a beber, bailamos, cantamos, el jamón le toca al mismo odre de siempre, es decir, mas o menos lo que suele pasar en estas ocasiones.
Para el año es mejor que me contrate Chelo, la que pone el bar, ¡vintecatro gin tonic que puxen!, querían agotarme las existencias, pero bueno será por nevera...
´Cantante é abondo, pero co micro na man cero patatero...
Bueno hasta aquí todo, para el año que viene, el amigo que no perdió detalle, está dispuesto a ofrecernos un servicio integral de coctelería acrobática. Esperaremos expectantes las evoluciones del susodicho elemento. Pero bueno parece que lo ha cogido con ganas pues ya empezó el periodo de aprendizaje, y a lo mejor nos sorprende y todo.
No hay mayor satisfacción que dar sin esperar recibir. Las sonrisas que provocan nuestras acciones, conseguir que la persona que comparte tu vida sea feliz, aunque solo sea por un pequeño momento en un día como el de hoy, eso ya vale la pena. Llegará un día que nuestros recuerdos serán nuestra riqueza. Siempre al llegar al final de una etapa de nuestra vida… en nuestros recuerdos, solo van a quedar los buenos momentos, aquellos que por mas tiempo que pase, ¡jamás se olvidan! y ESO ES LO UNICO QUE CUENTA.
El papel, es solo papel........
